martes, 10 de noviembre de 2009

SUBCAMPEÓN INCORPORA LA PALABRA 'CAMPEÓN'


Con legañas. Escribo la última columna del año en AS aún con legañas en los ojos. Salimos a celebrar el subcampeonato la noche de la carrera, pero me retiré a una hora prudente porque toca volver a subirse a la moto a la una y media con la Yamaha nueva. Me da bastante pereza, pero hay que hacerlo. Primero saldré con la moto antigua, para coger sensaciones con ella y hacer un tiempo aceptable con el que poder compararme con la moto nueva. Es la forma de saber si va mejor o peor.

La pretemporada. Imagino que alguno se sorprenderá de vernos empezar a trabajar en la temporada nueva sólo un día después de que se acabe la anterior, pero es importante empezar a trabajar ya para estar a tope cuanto antes. Cada año las motos mejoran y en este primer test sólo vamos a probar un chasis, porque el motor nuevo aún no está listo. La verdad es que el chasis es una de las cosas que mejor funciona de la M1, así que no sé si conseguirán mejorarlo. Lo bueno es que voy a tener todo el material nuevo a la vez que Valentino Rossi.

Traspasos a Honda. Honda está europeizando su equipo. Ha cogido a Suppo, de Ducati, aunque él es más para asuntos de márketing, a dos técnicos de electrónica de Yamaha, Andrea Zugna y Christian Battaglia, y a mi telemétrico, Carlo Luzzi. Es algo preocupante porque Honda es un gigante y lleva tiempo sin ganar, lo que hace que tenga mucha hambre. Seguramente, el año que viene nos resulte difícil a los de Yamaha batirles, pero no tenemos que lamentarnos. Los pilotos tenemos que ir más rápido aún y nuestros técnicos no deben perder la eficacia que había con los que teníamos antes. Yamaha tendrá que fichar algún electrónico nuevo o sacar alguno de Japón. Confío en mi marca.

Limitación de motores. En 2009, desde Brno, hemos tenido una restricción de motores, cinco para las siete últimas carreras, y en 2010 será aún mayor, con seis para todo el año, 18 carreras. Creo que Honda y Ducati han sufrido menos que nosotros con el kilometraje, porque los suyos duran más y con la nueva reglamentación no han perdido potencia. Nosotros, en cambio, sí que hemos perdido algo y antes de esta norma ya nos faltaba un pelín de motor, así que esto nos deja en una situación peor. Por todo esto, es fundamental que trabajen muy bien en Yamaha con el nuevo motor.

Juego de letras. Haciendo un balance general del año, me queda la sensación de que, entre todos, tenemos muy mal acostumbrada a la afición española, porque cada fin de semana de carreras se ven podios y victorias de sus pilotos. Para mí conseguir un subcampeonato de MotoGP supone algo grande, ser el segundo piloto más rápido del planeta, y creo que igual no se le da su justo valor. Para mí tiene muchísimo porque, una vez que ya no podía lograr el título, quería acabar segundo como fuera. Además, es la única posición que incorpora la palabra 'campeón', aunque delante lleve un 'sub'. Es importante, porque el tercero es 'tercero', sin más, y el segundo es 'subcampeón'. Suena mejor.

Lo peor. El momento más duro del año para mí fue la caída de Jerez. Había empezado bien el campeonato y, de repente, lo veía perdido en la tercera carrera. Eso me mató psicológicamente. Me cabreé mucho más que cuando me caí en la cita de Australia, porque allí ya sabía que el título se podía escapar. Lo bueno del palo de Jerez es que a la siguiente carrera, en Le Mans, recuperamos de golpe todos los puntos perdidos gracias a nuestro gran trabajo y al fallo de Rossi.

El futuro. Os recomiendo que os preparéis para la tormenta de rumores acerca del futuro que vamos a vivir. Las negociaciones y las ofertas empezarán más pronto que nunca. Los 'cuatro fantásticos', como muchos nos llaman, terminamos contrato y eso es algo que nunca se ha vivido, y que va a hacer muy interesante y divertido el mercado de fichajes para 2011. Va a ser incluso más cambiante que el del fútbol. Igual que para 2010 no ha habido ningún cambio de cromos, creo que para 2011 sí que va a haber movimientos de fichas. Como mínimo uno... Rossi dice que él y yo no podemos seguir juntos en Yamaha, pero para mí eso no sería un problema.


Despedida. Toca despedirse. Pero antes quisiera dejar constancia de lo impresionado que estoy con la evolución de mi imagen entre los aficionados de principio al final de año. Según los de 'Speed Genius', mi marca de merchandising, en España se ha igualado la venta de mis productos con la de Valentino, y él es un piloto muy querido aquí, por lo que eso me llena de orgullo. Para mí la afición es muy importante y un estímulo más para esforzarme. Gracias por vuestro apoyo, por vuestra paciencia para leer mis líneas y hasta otra.